LOS PROBLEMAS DE COLUMNA EN CANINOS

Los problemas de columna pueden ser congénitos o adquiridos. Esta nota abordará el problema adquirido de mayor frecuencia de presentación, las discopatías o hernias de disco en la especie canina, ya que los felinos tienen una baja incidencia de ellas.
Existen básicamente dos tipos físicos a considerar, los llamados condrodistróficos (ejemplo: Dachshund, Pequinés) y los no condrodistróficos (ejemplo: Dóberman, Ovejero alemán) y alguna raza en particular cuya columna se comporta como condrodistrófica aunque no lo sea (ejemplo: Cocker spaniel, Cocker americano).
Las razas condrodistróficas tienen por conformación física una tendencia a padecer discopatías a joven edad, pudiendo sumarse a esto la calcificación discal única o múltiple.
Los no condrodistróficos padecen discopatías a edad más avanzada por envejecimiento de los discos.
Esta es una generalidad; obviamente siempre hay excepciones, como en el Dóberman, que cuando padece inestabilidad cervical puede presentar discopatías desde temprana edad.
Las discopatías pueden manifestarse en un amplio abanico que va desde sólo dolor sin gran afección neurológica, hasta parálisis con serio compromiso medular y pronóstico malo para recuperar la capacidad de deambulación.
Es importante saber que hay algunas medidas de prevención que, puestas en práctica, disminuyen (no eliminan) la probabilidad de que el animal desarrolle una discopatía. Para decirlo de mejor manera, hay situaciones, usos y rutinas que promueven la ocurrencia de las discopatías (es el caso típico el collar de ahorque, entre otras).
También es importante aclarar que muchos animales que quedan paresicos o parapléjicos vuelven a caminar, a veces con cirugía, a veces con tratamiento médico y fisioterapia, y a veces con ambas cosas. Es fundamental un examen neurológico al comienzo del cuadro y 72 h después de haber instaurado una terapia agresiva con corticoides, para establecer el status neurológico final y a partir de ahí emitir un pronóstico.

Méd. vet. Nancy Digón
Traumatología, fisioterapia y neurología


FOTO:

Yogui, felina CE paciente del Serv Veterinario Integral

SIDA FELINO: VIF, Virus de la Inmunodeficiencia Felina

El Sida felino es causado por un retrovirus similar al HIV que genera una infección en los felinos en cualquier momento de sus vidas.
Se transmite de gato a gato generalmente por mordeduras, y también, en menor medida, por vía transplacentaria y canal del parto (de su mamá).
Es una enfermedad que produce inmunosupresión ya que afecta al sistema inmune del animal, causando una caída de sus defensas y promoviendo la infección con otras enfermedades oportunistas, como el Micoplasma Hemofelis (Hemobartonella felis), Hongos (Criptococos, Microsporum), Toxoplasmosis, Calicivirosis, Herpes virus, Bordetella (complejo respiratorio), Infecciones de piel (piodermias), Vilef (Virus de la Leucemia Felina) y tumores, entre otros.

¿Cómo podemos prevenir la enfermedad?

Lamentablemente, en nuestro país no contamos con una vacuna preventiva para la enfermedad, pero sí podemos, mediante los controles veterinarios, hacer su diagnóstico precoz. Esto nos permitirá, con tiempo, planear el mejor tratamiento para nuestra mascota.
El diagnóstico clínico se basa en una serie de síntomas clínicos, algunos inespecíficos, que ayudan a pensar en la posible infección. El decaimiento, la letargia, la anorexia, la fiebre y asociaciones con los agentes anteriormente mencionados como las enfermedades de piel y respiratorias, hacen sospechar al médico veterinario de esta enfermedad.
Para poder hacer un diagnóstico certero, contamos con una serie de estudios serológicos (un kit comercial) que ayudan a confirmar la enfermedad, así como también pruebas más modernas como el PCR, con el que por suerte hoy contamos en el Hospital escuela de la Facultad de Veterinaria de la UBA.

¿Existen los tratamientos?

Hoy en día, gracias a los avances en la investigación de la enfermedad y a los especialistas, contamos con algunas alternativas que brindan a nuestros pacientes calidad de vida y, por sobre todas las cosas, la posibilidad de poder controlar la enfermedad en las diferentes etapas.
Estas alternativas, además de los tratamientos convencionales y de sostén, son:
La inmunoterapia, que brinda un soporte eficaz en el mantenimiento del sistema inmune, inmunomodulándolo con sustancias externas como el interferón y diferentes citoquinas que el metabolismo necesita para combatirlo.
Otras, muy utilizadas, son las terapias con AZT, medicación humana que ofrece muy buenos resultados en los gatos.
Es por todo esto que recomendamos que visite a su veterinario de cabecera como manera de prevención y control de esta enfermedad, ya que hoy contamos con herramientas para que nuestros gatos puedan convivir con ella, mejorando su calidad de vida.


Fuentes:
-Virus de la Inmunodeficiencia Felina (VIF): evaluación de las globulinas en pacientes infectados espontáneamente. Gómez, N1; Gisbert, M. A.1; Ramayo, L2; Bratanich, A3, Castillo, V1; Suraniti, A1
-Tratamiento de retrovirosis felina. Gómez Nélida, Collado Alcalá Victorio.
-www.civargentina.com.ar
-Virus de la Inmunodeficiencia y SIDA felino. Salud, historia y sanidad. Revista online.

Adaptado por Natalia Luka

FOTO: Pepe, felino CE Smoke Tabby paciente del Serv Veterinario Integral

LA ETAPA GERIÁTRICA

Con los avances en diagnóstico y tratamiento se incrementó notablemente la cantidad de pacientes geriátricos en los ficheros veterinarios.
Esta etapa de la vida implica grandes cambios en nuestra mascota y es normalmente poco comprendida por propietarios y también por algunos colegas.
Es común que el perro tenga un paso gradual y notorio desde la adultez a la etapa geriátrica, mientras que en el gato ese cambio sea más brusco y a edad más avanzada.
En ambos, como en todo ser vivo, los sistemas y órganos envejecen y se deteriora su funcionamiento, lo que produce manifestaciones clínicas que muchas veces son ignoradas o poco valoradas al considerarlas como normales porque “está viejo”.
Excede a esta nota describir todos los cambios posibles que tengan relación con una enfermedad, para eso debe consultarse al veterinario de cabecera, pero sí es interesante aclarar algunos puntos de consulta frecuente.
El más común se refiere a las horas de sueño, “duerme todo el día, ¿es normal?”
Perros y gatos jóvenes y sanos duermen entre el 75 y 80 % de las horas del día en ciclos de sueño diferentes al nuestro.
En la etapa geriátrica, este tiempo se incrementa y el sueño es a veces tan profundo que se hace difícil despertar a la mascota. Esto ocurre por factores que involucran al envejecimiento cerebral mismo y a la declinación de los sentidos, particularmente la audición.
Con respecto al envejecimiento cerebral, puede darse de un modo fisiológico o patológico, apareciendo lo que se conoce como DCC (disfunción cognitiva canina) cuyo signo más temprano es la alteración del ciclo sueño/vigilia. El animal permanece despierto durante la noche, deambulando y a veces vocalizando.
La DCC es una enfermedad degenerativa similar al Alzheimer humano y si bien está más descripta en perros, muchos gatos añosos también presentan sintomatología de DC.
Como su equivalente humano, no tiene cura, pero puede medicarse para demorar la progresión.
Resumiendo, muchas enfermedades que pueden aparecer en el animal geronte no son curables pero sí tratables.
No hay que dar por sentado que los cambios de conducta o hábitos de nuestra mascota sólo se deben a la vejez, porque pueden tener una causa física subyacente que puede ser diagnosticada y medicada.
Si ya conseguimos hacerlos más longevos, hagamos que transiten la última etapa de su vida lo más confortablemente posible.

Nancy Digón
M.V especialista en Neurología y Fisioterapia.

FOTO: Miguel. Fel Común Europeo, 4 años.

PENSIONADO A DOMICILIO

Si viajás, y necesitás gente de confianza que cuide de tus mascotas, no dudes en consultarnos!
Brindamos un servicio de pensionado a domicilio exclusivo para nuestros pacientes y referidos.
Cuidamos de tu mascota, le damos de comer, le cambiamos las piedritas, y sobre todas las cosas, les brindamos mucho amor en tu ausencia!
Para evitar el estress del cambio de hábitat, especialmente en gatos, acá una alternativa diferente para que viajes confiado.

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SVI crece!

El Servicio Veterinario Integral se renueva, no sólo desde su imagen sino también hemos ampliado los servicios de especialidades que brindamos.

Incorporamos nuevos especialistas a nuestro equipo, como Marcelo Zysman en manejo del dolor, Carolina Gabriele en hematología y banco de sangre, y Nancy Digon en neurología y fisioterapia.

Seguimos trabajando con mucho éxito junto al Centro de Inmunoterapia Veterinario con sede propia en los tratamientos de enfermedades infectocontagiosas en felinos con protocolos inmunoterápicos, y también en enfermedades alérgicas y oncológicas en perros y gatos.

Hemos renovado el staff de nuestro pensionado a domicilio para poder cubrir más zonas dentro de la Capital Federal.

Esperamos poder cubrir las expectativas de nuestros clientes y seguir brindando un servicio exclusivo y completo para el cuidado y prevención de la salud de nuestras mascotas.

MV.Paula Mongelos
Dirección SVI

Natalia Luka
Coordinación SVI

MASCOTAS Y DUELOS

¿Qué lugar ocupa una mascota en nuestras vidas?
Las personas que sienten amor por sus animales domésticos habrán de tener distintos tipos de duelo de acuerdo a sus personalidades y a los estilos de vínculos que hayan establecido.
Así como los seres humanos hacemos diferentes tipos de duelo ante la pérdida de otro ser humano, con las mascotas pasa algo similar. Podrá ser un duelo parecido cuando la relación fue muy especial, y muchas veces requiere de un apoyo terapéutico específico.
Hay que destacar que los animales domésticos, en especial los perros, son muy compañeros. Por algo se repite que es el mejor amigo del hombre. Reciben con muestras de afecto a sus dueños, y también en todo momento están dispuestos a ofrecer y a recibir cariño.
Pese a todo, las mascotas, por el tiempo que ocupan en la vida cotidiana, terminan por resultar seres cuyo vínculo puede volverse poco, muy, o extremadamente exigente. Esto influirá cuando la pérdida se concrete.
Se suele decir que las mascotas se parecen a sus dueños, y es cierto que muchas veces reflejan el modo de ser de sus amos. En general, cuando se trata de personas que viven solas con la compañía de esa mascota, puede llegar a producirse una identificación, o la mascota es un “todo” con el dueño, donde se han borrado las diferenciaciones.
Como todos los animales, tienen un ciclo de vida menor que los seres humanos y el propietario debe estar preparado para ese crucial momento.
En general, para los ciclos vitales del ser humano, perros, gatos, caballos y diferentes animales contribuyen al desarrollo de la personalidad. También ayudan mucho a personas con diferentes problemáticas; por ejemplo, existe la equinoterapia y también se está trabajando con animales para los trastornos de conducta alimentaria o con niños autistas. Es decir que ayudan tanto en la salud como en la enfermedad. Durante la niñez, adolescencia, adultez y ancianidad refuerzan su bienestar el poder compartir sus afectos, no exclusivamente con sus congéneres.
En mi experiencia clínica he tratado muchos pacientes que han consultado por el sufrimiento de la pérdida de sus mascotas o que durante el proceso terapéutico tuvieron que atravesar por esa situación. Siempre hay que tener en cuenta las diferencias individuales y las relaciones establecidas con ellas y con las demás personas del entorno.
En algunos casos sobrevendrá un duelo con mucho sufrimiento porque ese ser humano que perdió para siempre a su animal querido está sintiendo que se ha muerto una parte de sí mismo, o como sucede entre parejas sin hijos donde un perro puede ser tratado como tal. Generalmente es donde se necesita una intervención terapéutica. En otros, esa mascota muerta estaba dentro de una trama familiar, pero el duelo llevará un lapso más breve. Y hasta se podrá, con el tiempo, volver a tener otra mascota, ya que la experiencia resultó gratificante y enriquecedora.



Lic. Bibiana Piaggio
Psicoanalista
Cel: 15-5042-9414


FOTO: "Pepa", canina Whippet, paciente del SVI.

CANCER EN PERROS Y GATOS

Muchos de ustedes se preguntarán qué significa la palabra “cáncer”… y a partir de ahí viene a mi memoria una clase de patología en la facultad, cuando quisieron definir qué o quién lo causa. La definición derivó, finalmente, en qué cosa NO lo produce , dándonos a entender la variedad de estímulos que sí lo pueden producir.
El cáncer no es más que la proliferación de una célula, a partir de un estímulo que modifica su ADN, para aumentar así en número y desarrollar la enfermedad.
Muchos estímulos son conocidos y otros no, desde la radiación, algunos virus, el estrés, la inflamación crónica, entre otros, que podrían predisponer o directamente alterar a la célula para que ésta comience el proceso tumoral.
Cuando el cáncer se instala, comienza a parasitar a la mascota alterando varios de los sistemas biológicos: crece en forma muy lenta; interactúa y evoluciona junto al huésped (perro o gato); libera sustancias para poder producir sus propios vasos sanguíneos para poder nutrirse; evade el mecanismo que utiliza el propio animal para eliminar las células viejas; produce sustancias para su propio crecimiento celular; posee la capacidad de metastatizar (poder invadir otras partes del organismo) y, uno de los más importantes, evade al sistema inmune para no ser reconocido por éste, o lo modifica, produciendo así una caída de las defensas del animal, que lo predispone a padecer otras patologías.
Es aquí donde aparece el gran desafío de nuestro animal contra el tumor, y donde debemos actuar, como profesionales, para poder llegar al diagnóstico y elegir el tratamiento que sea más adecuado para el tumor en cuestión.
Hoy en día existen varios métodos para poder hacerlo, desde análisis de sangre, biopsias, punciones y cirugías, y a partir de allí varios tratamientos: la cirugía (muchas veces para extirpar total o parcialmente el tumor), quimioterapia, Inmunoterapia e Inmunooncología, homeopatía, etc.
Es importante recordarles controlar a su mascota con su veterinario de confianza a partir del chequeo de rutina, para poder así prevenir o diagnosticar rápidamente la enfermedad y poder disponer del tiempo necesario para establecer el o los tratamientos y lograr la mejor calidad de vida para nuestra mascota.

Natalia Luka
Fuente: Centro de Inmunoterapia Veterinario www.civargentina.com.ar


FOTO: "Piaf", felina Común Europea, paciente del SVI

AUSCULTACIÓN: ¿ES TAN IMPORTANTE?

Yo siempre digo que auscultar bien es la tarea más difícil que tiene un veterinario.
Los animales jadean, gruñen, ronronean, se mueven y tiemblan, todo lo cual perjudica una adecuada auscultación, pero si además los dueños aprovechan ese momento para preguntar distintas cosas o contarnos sobre lo que observaron de la mascota, tenemos asegurado el fracaso total de la maniobra. Y aunque resulte antipático decir esto, entiendo que la conversación del propietario es la causa más común de que las alteraciones cardíacas no sean detectadas a tiempo.
Pero, ¿es tan importante una buena auscultación?
Definitivamente, sí. A través de ella podemos detectar soplos o arritmias que nos estarán indicando que nuestro animalito tiene una alteración que requiere ser estudiada.
Generalmente la gente piensa que las cardiopatías son de animales viejos o claramente sintomáticos y por lo tanto no dan importancia a este tipo de controles, pero a diferencia de lo que sucede en humanos, ningún soplo en caninos ni felinos es normal a ninguna edad, y su seriedad requiere estudios para ser determinado. Por esta razón, ante el descubrimiento de un soplo en un animal doméstico, siempre se debe recurrir al cardiólogo que indique y realice los estudios correspondientes con la finalidad de tomar las medidas adecuadas lo antes posible.
Un soplo es una alteración en uno o varios ruidos cardíacos, y en su mayoría corresponde a un mal funcionamiento de una válvula cardíaca, lo que produce una turbulencia en el paso de la sangre por esta válvula, alertándonos de alguna anormalidad.
Un soplo es indicador de una enfermedad congénita si se trata de un cachorro, o de una valvulopatía o miocardiopatía en animales adultos.
Así mismo, las alteraciones en el ritmo normal de la mascota nos indican la posibilidad de miocardiopatía o incluso de problemas extracardíacos que pueden ser serios.
Si no se toman las medidas a tiempo, el corazón trata de compensar esa alteración modificando su forma y aumentando su frecuencia cardíaca y la cantidad de sangre circulante, lo cual al principio no produce ninguna sintomatología, pero con el paso del tiempo, esta remodelación patológica de la conformación y fisiología cardíacas van a traer tos, agitación, falta de resistencia al ejercicio y, finalmente, descompensación y muerte.
Por esto es fundamental que los veterinarios clínicos realicen la revisación cardiológica básica de todos los animales que concurren a consulta, tanto a la pediátrica como para cada una de las vacunaciones anuales.
Para esto es necesario que los dueños tomen conciencia e intenten mantener al animal lo más quieto posible, con la boca cerrada para evitar jadeos y sin hacer ningún comentario mientras el colega ausculta, para de esta manera propiciar que la maniobra sea adecuada.
Cada vez con mayor frecuencia vemos cardiopatías congénitas en cachorros que concurren a su primera consulta (principalmente en animales de raza pero también en mestizos) que, encontradas a tiempo, tienen un mejor pronóstico, quirúrgico o médico, que si se detecta cuando el corazón ya sufrió un proceso de remodelado patológico.
Por este motivo es mucho mejor prevenir, porque aunque las cardiopatías no se puedan curar, estudiándolas a tiempo y tomando las medidas adecuadas, el tiempo hasta la descompensación se va a alargar notablemente.

Dra. Claudia M. Gerber
Médica Veterinaria
Cardióloga Especialista UBA

Foto: "Morgan", canino paciente del Servicio Veterinario Integral

EMBARAZO PSICOLÓGICO

El embarazo psicológico es una entidad que ocurre muy frecuentemente en las perras, generalmente luego del primer celo en forma fisiológica, o cuando se les prescriben tratamientos hormonales.
El ciclo sexual de las perras puede ser de dos formas: entrar en celo, ser servida por el macho y quedar preñada, o entrar en celo pero al no ser servida, no habrá preñez, y volverá al estado original.
Las perras entran en celo dos veces al año, generalmente en otoño y primavera, y en el cual se manifiestan ciertas actitudes en cada etapa, las cuales podemos reconocer.
¿qué es el embarazo psicológico?
Es síndrome observado en perras no preñadas caracterizado por signos tales como preparación del nido en el hogar, cambios de comportamiento ( comportamiento pre parto, maternal, agresión, lamido y adopción de objetos inanimados) , aumento del peso, agradamiento mamario y lactancia como los más comunes. También se puede observar un incremento en el consumo de alimentos y agua, anorexia, diarrea, contracciones abdominales como signos menos comunes.
Generalmente el embarazo psicológico aparece típicamente entre 6 a 12 semanas después del celo.
Muchas veces se autolimita (no hace falta tratamiento) y en otras ocasiones debemos intervenir con tratamientos esteroideos.


Existen complicaciones que se pueden presentar como por ejemplo: mastitis (inflamación de la glándula mamaria por retención de leche), dermatitis mamaria, entre otras.

Debemos tener en cuenta que las hembras suceptibles al síndrome, podrán repetirlo en ciclos posteriores.

Es por ello que recomendamos siempre recordar las fechas de celo, y consultar con su veterinario de confianza, si aparecen signos de estas características para que podamos intervenir.

Natalia Luka

Fuente http://www.ivis.org


FOTO: Dorothea, perrita Dóberman Pincher paciente del SVI

Inmunoterapia: nuevas alternativas en medicina veterinaria

Nuestro Servicio Veterinario Integral comienza a formar parte del Centro de Inmunoterapia Veterinario (CIV) como nueva sede Almagro, y tratamientos a domicilio.
Es así como les ofrecemos nuevas alternativas para la salud de nuestras mascotas, contando con tratamientos específicos para diferentes enfermedades en perros y gatos.
Las patologías que se pueden tratar con Inmunoterapia o inmunooncología son variadas: alergias, demodexia canina, enfermedades virales en gatos (Rinotraqueítis, Calicivirosis, VIF, VILEF, PIF), en caninos (Parvovirus, Brucella); cáncer en felinos (Carcinoma de células escamosas, Carcinoma mamario, linfoma), en caninos (Melanoma, Mixosarcoma), entre otros.
Nos sumamos, entonces, al equipo del CIV para poder ofrecerles cada día una mejor atención y estar al día con los avances en la medicina veterinaria.

Por cualquier consulta, comunicarse a: 155-154-0449, 156-503-8656 o a laveterinariaentucasa@gmail.com


www.civargentina.com.ar

RABIA

La rabia es una enfermedad de distribución mundial producida por un virus. Es una zoonosis, es decir, se transmite al ser humano.
Cuando hablamos de rabia, en realidad estamos hablando de diversos virus (por supuesto
todos ellos emparentados genéticamente), que adoptan distintas estrategias para atacar a nuestras mascotas.
Podemos afirmar que la rabia puede presentarse en todos los animales de sangre
caliente. En la naturaleza son los quirópteros (murciélagos) y los carnívoros los responsables de preservar este virus.
Si analizamos esta enfermedad y sus ciclos, el hombre, como especie susceptible, está en el centro.
Podemos definir un ciclo aéreo, donde murciélagos y otros quirópteros juegan un rol
preponderante; un ciclo urbano, donde perros y gatos son los protagonistas, y un ciclo rural, donde los animales de producción van a ser las especies afectadas predominantemente (rabia paralítica de la vaca). Por último, un ciclo silvestre, donde los diversos mamíferos silvestres serán afectados y, simultáneamente, reservorios (hábitat natural donde se encuentra el virus).
Ya en Argentina sabemos de la aparición de casos de rabia tanto en Ciudad
Autónoma de Buenos Aires, como en las provincias de Buenos Aires, Jujuy y Salta.
A su vez, provincias como Chaco, Tucumán y Corrientes comunican frecuentemente sus casos de rabia rural.
Cuando hablamos de ciclos, estos no son estáticos, están en dinámica interacción: gatos que juegan con murciélagos, personas en ámbitos naturales, y cuantas combinaciones imaginemos.

¿Cómo prevenirla?
El Médico Veterinario adopta un rol fundamental en la prevención de esta enfermedad y en la Educación Sanitaria de la población. Lamentablemente la vacunación es insuficiente en nuestro país.
Sabemos que la cobertura de todos los animales de la población para evitar que la enfermedad la afecte debe ser superior al 70%. Esto es, deberían estar vacunados 7 de
cada 10 perros y gatos definidos en una provincia o estado en cuestión, cosa que no ocurre hoy en día.
Aprovechamos para recordarles que consulten con su médico veterinario de confianza acerca de la vacunación anual de su mascota, para poder así estar tranquilos de que nuestra mascota se encuentra perfectamente inmunizada. Y no olviden que la enfermedad puede transmitirse al ser humano, y que su desenlace podría ser fatal tanto para ellos como para cualquier animal infectado.



MV Pablo F. Maure
Director del CIV
www.civargentina.com.ar
Adaptado por Natalia Luka


FOTO: " Gato", gato macho Común Europeo, paciente del Servicio Veterinario Integral

Los hongos: " Tiñas"

La dematofitosis es una infección de la piel, uñas, pelos y estrato córneo que está ocasionada por diferentes especies de hongos. Estos organismos son capaces de invadir y automantenerse en los tejidos queratinizados.
La “Tiña”, Microsporum canis, es una de las que más aparece en nuestros animales de compañía.
Cuando el animal es expuesto a un hongo, la infección puede ser o no establecida. A pesar de la exposición, puede no resultar la enfermedad en la forma de lesiones de piel.
Se observa que los animales jóvenes son más susceptibles a la infección y con mayor tendencia a mostrar lesiones clínicas que los animales adultos.
Además de la edad (principalmente animales jóvenes), muchos factores que predisponen dicha enfermedad son la mala nutrición, sobrepoblación animal, inmunosupresión, estrés, mal manejo y la falta de un periodo adecuado de cuarentena para los animales infectados.
Las Tiñas son importantes no sólo por el hecho de que afectan la piel en perros y gatos, sino que también pueden ser transmitidas a otros animales y a los humanos.
La clásica lesión de “Tiña” es circular, y puede tener un diámetro de 1 a 4 cm. Pueden aparecer en cualquier lugar del cuerpo, pero se presentan principalmente en la cabeza, orejas, cola y patas delanteras, aunque puede expandirse de distintos tamaños y resto del cuerpo (generalizarse) y por lo tanto verse lesiones de forma oval, irregular o difusa, de bordes realzados y eritematosos (colorados) y depiladas (sin pelo).
Las lesiones pueden haber aparecido poco tiempo antes o bien ser cuadros crónicos. Por lo general, no causa prurito a los animales afectados pero a veces, si comienza a rascarse, puede deberse a una infección secundaria de la lesión por bacterias de la piel.

¿Cómo diagnosticamos?
Debemos realizar la consulta al médico veterinario, quien revisará en forma clínica las lesiones descriptas, y podrá también contar con la ayuda del laboratorio para confirmar el diagnóstico con una prueba muy sencilla y de bajo costo.
¿Cuál es el tratamiento?
Diversos son los tratamientos que podemos sugerir para cada caso. Lo importante es evaluar, antes que nada, en qué condiciones se encuentra el animal (si está estresado, con las defensas bajas) y buscar la causa base. Además de ello, debemos realizar el tratamiento específico contra los hongos en forma oral (comprimidos), lo cual recomendamos más que los tratamientos tópicos que llevan mucho tiempo, y muchas veces al fracaso. Existe en el mercado una vacuna preventiva y curativa que se puede combinar con mucho éxito para esta enfermedad.
En animales de pequeña edad hay que tener en cuenta que NO podremos usar tratamientos orales por los riesgos que existen, por lo que deberemos tener paciencia y ayudar con tratamientos locales (Pervinox tópico) hasta evaluar el caso en particular.
Los tratamientos orales NO podrán usarse en hembras preñadas, por los riesgos que generan al bebé en gestación.
Es importante tener en cuenta que la enfermedad causada por hongos es dificultosa de tratar y requiere varias semanas para la curación, por lo que debemos tener paciencia y esperar los resultados al tratamiento.

¿Zoonosis?
Sí, es una enfermedad que se transmite entre animales y al hombre. Muchas veces se resuelve espontáneamente o requiere de tratamientos similares. En personas que se encuentran inmunosuprimidas (SIDA, Radiaciones, quimioterapia), la enfermedad puede ser más difícil de tratar y puede persistir por más tiempo.



Natalia Luka

Foto: "Cucuruze", felino macho Común Europeo. Paciente del SVI

PARASITOSIS Y ENFERMEDAD

Los parásitos que pueden afectar a nuestras mascotas son variados, y no sólo pueden afectar su salud, sino también la de los humanos (zoonosis). Se clasifican en:
Vermes redondos: Toxocara, Trichuris, Ancylostoma.
Vermes chatos: Taenias, Equinoccocus, Dipilidium.
Protozoarios: Coccidios, Giardias.
Cada uno de estos parásitos presenta ciclos de vida diferentes, y es por ello que deberán ser identificados para poder realizar el mejor tratamiento preventivo o terapéutico en la mascota, tanto en el hogar como en un criadero (en donde toma mayor importancia económica).
Estas enfermedades parasitarias pueden afectar tanto a perros como a gatos, e incluso al hombre. En los animales puede generar una enfermedad leve y hasta fatal en cachorros.
Las principales formas de contagio son: oral (por ingestión de alimentos o agua contaminada, contacto con materia fecal infectada, leche e insectos); percutánea (por piel); galactógena (por el amamantamiento) e intrauterina (en gestación).
Prevención: realizar análisis coproparasitológico para poder identificar los parásitos y así realizar el tratamiento correspondiente. Recordar que un resultado negativo no significa que el animal esté libre de parásitos, ya que algunas larvas no se encuentran en ese momento en el tracto intestinal o no están poniendo huevos. En el mercado se encuentran muchos fármacos (comprimidos, jarabes, suspensión, pastas y pipetas) que podrán adaptarse a las diferentes necesidades de nuestra mascota, de acuerdo a la sugerencia del veterinario.
Los síntomas que podemos encontrar: mal estado general, pérdida de peso, debilidad, manto sucio, anemia, diarrea, vómitos, lesiones en la piel, deshidratación hasta la muerte en los casos muy graves, especialmente en cachorros.
Es por ello que recomendamos no subestimar a los parásitos y realizar asiduamente visitas al veterinario, quien les recomendará los pasos a seguir a lo largo de la vida del animal, y no realizar las desparasitaciones sin consultar. Es muy frecuente que el propietario de la mascota adquiera los antiparasitarios que se encuentran en el mercado sin consulta previa al veterinario, sin saber cuáles son los riesgos de la utilización de cada fármaco. Es así como también realizan tratamientos incompletos por carecer de la información necesaria que le brindará el veterinario en la consulta, de acuerdo a la historia clínica de nuestra mascota.

Natalia Luka

FOTO: "Benito", caniche negrísimo. Paciente del Serv vet Integral
Fuente: manuales Bayer. www.sanidadanimal.com